27 0ctubre 2010

Como dije ayer, en esta ocasión hablare de un video dado a conocer el lunes pasado, donde aparece el hermano de la exprocuradora de Chihuahua rodeado por sujetos con uniforme militar, chalecos antibalas negros y enmascarados, que apuntaban sus rifles de alto poder a la cabeza de su rehén. Una voz masculina lo interrogaba utilizando preguntas directas acerca de varios crímenes sucedidos en el estado norteño de Chihuahua. Además, cuestionaba al interrogado acerca del papel que tenían diferentes comandantes de la policía estatal dentro del grupo delictivo denominado la Línea.

El secuestrado respondía las preguntas con una tranquilidad asombrosa y con la seguridad de estar diciendo la verdad, en ocasiones aparentaba estar leyendo un texto.

La que fuera responsable de impartir justicia, en el estado más violento de México, negó todas las acusaciones en contra de ella. Afirmó que su hermano había sido secuestrado por policías en activo y que lo obligaron a hacer aquellas acusaciones para desprestigiar su excelente trabajo; combatiendo a los dos cárteles que disputan el control de Chihuahua.

Pudo ser cualquiera de estas dos posibilidades: que los secuestradores sean del cártel contrario al de la Línea y que con la difusión del video busquen poner en evidencia a las autoridades; o bien si el video fue hecho para manchar la reputación del gobierno anterior, como afirma la hermana del secuestrado, quien además acusó a miembros de la administración actual.

De cualquier forma este video mostraría que el crimen organizado ha logrado penetrar a gobiernos estatales.